Prados

Abril, Mayo y Junio son los mejores meses para visitar los prados de Gredos, auténticos jardines naturales. 

Partimos a través del bosque. Los robles visten un particular verde recién brotados. Una intensa actividad biológica es sinfonía de movimiento y sonido entre las ramas.

De Carvajal de Gredos pasamos a campo abierto, es un corto paseo, avanzamos por matorral montano y nuestra vista sobrevuela los valles. El paisaje rebosa luz y color ¡Ya vemos los prados!

Son terrenos despejados y cercados de piedra, producen forraje silvestre y se guarda en casas de heno. Son el gran legado de antiguos vaqueros, transformaron la montaña favoreciendo la biodiversidad. Cada prado contiene su fuente.

Entramos y vemos gran variedad de plantas, aquí crecen protegidas de herbívoros. Constituyen el hogar de muchas mariposas y otros pequeños artrópodos, animales muy importantes para toda la vida salvaje, pues son polinizadores y pieza clave en la cadena trófica.  

Navegamos por el verde pasto entre miles de flores. Encontramos algunas orquídeas. Hay infinidad de formas y colores. Estamos en plena montaña, rodeados de increibles vistas ¡Así es la primavera en la Sierra de Gredos!